sábado, 24 de septiembre de 2016

Galletas SIN AZUCAR de avena tipo Danesas



El otro día vi una receta que me llamó la atención por lo sencilla que parecía y la buena pinta que tenían las galletitas en cuestión.

Son unas galletas tipo danesas que Comice recomienda para las dietas de régimen o de mantenimiento... Podéis ver su receta aquí.


SIN AZÚCAR, que es substituida por el maltitol (apto para diabéticos, embarazadas, etc...) pero CON GLUTEN (uno de sus ingredientes).... y fácil, fácil, fácil....


Los ingredientes son los siguientes:

 Salvado de avena fino: 150 gr
   - Gluten de trigo: 50 gr
   - Levadura Royal: 1 cucharadita rasa
   - 1 huevo pequeño (si es grande no lo ponga todo): conviene que la cantidad total de huevo sea de unos 35 gr.
   - Mantequilla: 100 gr
   - Maltitol: 130 gr
   - Sacarina líquida: 1 cucharada sopera bien llena. Según tus gustos puede poner un poco más o un poco menos.
   - La ralladura de 1 limón (o 1 cucharadita de aroma de limón; nosotros empleamos la marca Bakery).
   - Un pellizco de sal
Y su elaboración es muy sencilla (como podemos ver en la página):
Sacamos la mantequilla de la nevera una hora antes de comenzar la preparación de las galletas para que coja la temperatura ambiente. Pasada la hora encendemos el horno para que se vaya calentando. Temperatura: 180º y con ventilador, si su horno dispone de él.
   Ponemos el huevo y la mantequilla en un recipiente y los batimos con batidor de varillas hasta que nos quede una mezcla homogénea. Añadimos el maltitol, la sacarina líquida, la ralladura de limón (o el aroma) y el pellizco de sal. Batimos todo. 
   Ponemos en un recipiente el salvado, el gluten y la levadura y lo mezclamos. 
   Vamos añadiendo poco a poco esta mezcla al recipiente sin dejar de batir, para que se vaya incorporando a la mezcla anterior. Si emplea una batidora eléctrica tenga cuidado con no batir demasiado. Tan solo lo justo para que la masa quede homogénea. La masa estará en su punto si se pega un poco a los dedos pero sin mancharlos. 
   Es el momento de envolverla en el film y dejarla reposar en la nevera durante 1 hora. Pasada la hora saque la masa de la nevera y quítele el film. Estará un poco dura y posiblemente le sea difícil amasarla. De ser así déjela un rato hasta que se ponga a temperatura ambiente y se vuelva más moldeable.
En este momento, os ofrezco varias opciones:

OPCIÓN 1:
En vez de dejar la masa en el frigorífico hasta que endurezca, la sacamos antes, cuando aún está blanda.
De esta forma la galleta, con el calor del horno, perderá su forma y se expandirá, quedando una galleta muy fina y crujiente (mi opción favorita).
Según nuestro gusto, pueden tostarse más o menos... Y es perfecta para comer en cualquier momento del día

OPCIÓN 2:
Dejamos enfriar totalmente la masa, pero al sacarla y darle forma, la "rebozamos" en avena fina.
A mí me encanta darle forma a mano, en vez de usar cortadores... creo que quedan con un aspecto casero delicioso.
De esta forma queda una galleta suave, pero algo más "empalagosa" que la versión anterior.
Es la galleta perfecta para acompañar el cafetito o el té de la tarde.
Y, como las anteriores, se pueden tostar al gusto de cada uno.
Si no queremos utilizar la avena, podemos sustituirlo por otro ingrediente... por ejemplo, si usamos aroma de coco en lugar de la ralladura de limón, podemos utilizar coco rallado para darle el toque final.

OPCIÓN 3:
En vez de rebozarla, la dejamos igualmente en el frigorífico hasta endurecer la masa y luego, simplemente la horneamos.
Queda una galleta jugosa, aunque ligeramente más crujiente que la versión anterior, pero sin ser crocante como la versión 1.

OPCIÓN 4:
Se puede añadir cacao en polvo cuando se hace la galleta, cubrirla con chocolate....
Y se puede saborizar con el gusto que más nos guste: yo hoy las he hecho de vainilla, con chocolate, de albaricoque, de coco y de limón!!!!

... Para todos los gustos!!!!....
Y a tí, ¿cuál te gusta más????